miércoles, junio 10, 2015

La Copa América 2015

Estamos a menos de 24 horas de que comience la Copa América, esta vez en nuestra casa, Chilito, que remozó como pudo los escasos estadios que se pudieron subir desde el nivel "cancha de barrio", donde se venderán combos de hamburguesa-bebida-papas Pringles a $7.000 y que ostenta a un zorro culpeo como mascota, que en realidad pasa por zorro europeo. Estamos orgullosos de recibir en nuestra patria a oleadas de turistas, hinchas y barrabravas de Argentina, Brasil, Perú, Bolivia y el resto del subcontinente, a quienes ya estamos instruyendo sobre evitar lanzazos, ejercer sus derechos como consumidor (por ejemplo, que reclamen por el combo de $7.000) y sobre cómo se usa una tarjeta Bip! A ellos, hermanos latinoamericanos, los acompañaremos de corazón en cada partido, sea en el estadio, en algún restaurante de colonia con tele, o en las fan zones de los malls.

Bromas aparte, me tiene bastante entusiasmado que el torneo se juegue aquí. Es como tener un minimundial en casa. Yo vivo cerca del Estadio Nacional, y me divierte pensar que en vez de estar a miles de kilómetros de Messi, James, Falcao y Neymar, estaré a sólo unos miles de metros. Algo es algo. Y de verdad anhelo toparme en las calles con grupos de hinchas viajeros de todos los rincones de Sudamérica, como para tener una idea de cómo es el ambiente en un Mundial. Y digo "anhelo" porque, por ahora, he visto a puros chilenos en la calle.

Y mientras cuento las horas para dejar a punto mi tele HD y armar la parrillita eléctrica que compramos en casa (departamento) a la sazón para este evento para dar el vamos a esta pequeña gran fiesta del fútbol, quiero compartir con ustedes algunas cosas que se me han venido a la cabeza o sucedido entre que terminó el Mundial de Brasil y estos días pre-Copa América.

La final del Mundial: La vi solito en casa mientras mi señora y mi hija tenían una salida de chicas al cine con amiguitas del colegio. En breve, el partido lo encontré fome, Alemania se merecía ganar y Messi destiñó. Rescato que en ese partido Alemania rompió las estadísticas, la tradición y la tendencia al ser el primer país europeo en ganar un Mundial en suelo americano, en 84 años de la competencia.

Entradas: Como era natural, me quise mover con entradas para esta Copa América. Como dije antes, vivo cerca del Nacional y caía de cajón comprar el "abono hincha local" para ver todos los partidos que se jugarán allá. Pero, como siempre, el plan se abortó. Aparte de que el abono costaba sus buenas lucas, era un compromiso muy complicado: seis partidos en tres semanas, casi todos en días de semana y con una niña que tiene que acostarse temprano para ir a clases al día siguiente. Si hubieran sido tres partidos, vale, pero ¿seis? Pucha, no en esta etapa de mi vida. Uno de mis hermanos, el que se compra todos los juegos FIFA y del que ya hablé antes, se compró dos de los dichosos abonos. Voy a tener que hacerle regalos, favores y chuparle los calcetines a ver si me invita a uno de los seis juegos. Aunque lo más probable es que nuevamente integraré las numerosas filas de quienes verán la Copa América por la tele, aunque se esté jugando a menos de un kilómetro de mi casa.

Barrio internacional: Como compensación a la frustración por no tener entradas, mañana, pocas horas antes del partido, nos vamos a dar una vueltita por los alrededores del Estadio Nacional a captar el ambiente, los hinchas, la barra ecuatoriana, y a comprobar si los vendedores de anticuchos y sánguches de potito cambian su stock por arepas y camarones, para captar a la clientela internacional.

Videojuegos: La final de la Champions League de la semana pasada me motivó a conseguirme el FIFA 14, el último juego salido para la PlayStation 2 (sí, tatita tiene una PlayStation 2 y todavía funciona) para poder jugar con Vidal en la Juventus y enfrentar a Cobreloa con el Bayern Munich. Escarbando un poquito vi con desazón que no existe, ni en los videojuegos FIFA ni en su rival PES, una edición de Copa América, como sí las hacen para los Mundiales. Pucha, si hasta la Champions tiene versiones para consolas. Así que agarré el FIFA 14, me fui a la opción "Crear torneo" y me hice mi propia Copa América. Claro que con dificultades, como que no se puede jugar con 12 equipos, sino con 8 o 16, y como no quería una Copa América resumida, la armé con 16. Además no están todos los países que van a participar en la Copa: faltan Paraguay, Venezuela y Jamaica, así que tuve que rellenar los grupos con países como Portugal o Nueva Zelanda. Empecé a jugar el torneo con Chile, por supuesto, y ya les puedo decir que en el primer partido Camerún me goleó 4-0 y me expulsaron a David Pizarro.

Eso es todo, por el momento. Mientras subo este artículo escucho de fondo las pruebas de sonido en el estadio y ya me preparo para retomar mi Copa América de PlayStation, en un partido donde seguro Perú va a barrer la cancha conmigo.

Una nueva fiesta comienza mañana. Que nos vaya bien, pero, por sobre todo, que la pasemos bien y nos portemos bien.